La Paz, 31 de julio de 2024 – La dirigencia del transporte pesado y sindicalizado ha sido convocada para retomar el diálogo este miércoles, en un esfuerzo por evitar el bloqueo de caminos y un paro que podría afectar la provisión de carburantes y dañar la economía del país.
El ministro de Economía, Marcelo Montenegro, anunció que ha extendido una invitación a la Cámara Boliviana de Transporte Internacional, encabezada por Héctor Mercado, para una reunión a las 10:00 de la mañana en La Paz. Esta convocatoria busca suspender el paro de 72 horas programado para comenzar el mismo día. Montenegro señaló: «Hemos emitido una nota al señor Héctor Mercado, invitándolo a una reunión mañana a las 10:00 en esta cartera de Estado.»
Por su parte, el ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, también llamó a la dirigencia del transporte sindicalizado, bajo la dirección de Lucio Gómez, a reanudar el diálogo en el transcurso del miércoles. Esto con el objetivo de evitar el paro de 24 horas anunciado para el jueves.
La Cámara de Transporte, en una reunión ampliada en Sucre, decidió iniciar un paro de 72 horas en protesta por el supuesto incumplimiento de sus demandas, aunque Mercado reconoció que se ha logrado un avance del 80% en las negociaciones. Entre las demandas del sector se incluyen el suministro de carburantes y la destitución de varios altos funcionarios, incluidos los ministros de Hidrocarburos, Franklin Molina, y de Obras Públicas, así como del presidente de YPFB, Armin Dorgathen, y el director de la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH), Germán Jiménez.
Mercado advirtió que, si en las 72 horas de paro no se resuelven sus demandas, se emitirá un voto resolutivo para pedir el adelantamiento de las elecciones. A pesar de esto, descartó cualquier posible encuentro con autoridades del Gobierno.
Montenegro lamentó la decisión de los transportistas y subrayó que esta semana se espera la llegada de diésel al país, después de que las condiciones climatológicas en el puerto de Arica mejoren, permitiendo la descarga de cuatro buques cargados con combustible. «No sería oportuno que el transporte pesado llegue a este extremo con el bloqueo, que va a perjudicar al pueblo boliviano y al propio sector,» advirtió el ministro.
Se estima que cada día de paro podría resultar en pérdidas de entre 20 y 30 millones de dólares, especialmente en el sector occidental del país. Montaño, por su parte, reiteró que las demandas de renuncia no son nuevas y expresó su esperanza de frenar el paro y el bloqueo previsto por el transporte sindicalizado, que también exige la normalización en la provisión de diésel. https://www.facebook.com/61560047799012/videos/862426969273061