El intento de Evo Morales por ser candidato en las elecciones generales del 17 de agosto sufrió un duro revés luego de que el Servicio Intercultural de Fortalecimiento Democrático (Sifde) del Tribunal Supremo Electoral (TSE) emitiera un informe negativo sobre la convención del Frente Para la Victoria (FPV), partido con el que el exmandatario buscaba postularse.

El Sifde observó que la convención, realizada en diciembre de 2024, no fue dirigida por el jefe nacional del FPV, incumpliendo así su propio estatuto. Esta irregularidad pone en riesgo la habilitación del partido, dejando a Morales sin una opción clara para inscribirse en la contienda electoral.
El FPV era una de las pocas alternativas que le quedaban al exmandatario, luego de que otras agrupaciones, como el Movimiento Tercer Sistema (MTS), rechazaran prestarle su sigla. Según el vocal del TSE Gustavo Ávila, este partido debe actualizar su militancia y renovar su directiva antes del 20 de marzo para evitar sanciones en el marco de la Ley 1096. En una situación similar se encuentran ADN y PAN-BOL, que también corren el riesgo de quedar fuera de los comicios.
A la incertidumbre sobre su candidatura se suma la proclamación de Andrónico Rodríguez como candidato presidencial por sectores del Chapare. La última proclamación ocurrió en Sacaba, Cochabamba, donde juventudes y autoridades locales respaldaron su postulación, desafiando la postura de Morales, quien insiste en que él es el único candidato legítimo del evismo. Esta es la segunda vez que Rodríguez recibe un respaldo público, debilitando aún más el liderazgo de Morales dentro del MAS.
Con la sigla en la cuerda floja y las divisiones internas creciendo, el evismo enfrenta un escenario cada vez más complicado de cara a las elecciones generales.