La Paz, 24 de septiembre de 2024 – El Pacto de Unidad evaluó la reciente «Marcha de la Muerte», impulsada por el expresidente Evo Morales, calificándola como un “fracaso” que no logró reivindicar los derechos sociales y económicos del pueblo boliviano, sino que se centró en imponer la candidatura de Morales con violencia.
Grover García, presidente del MAS-IPSP, aseguró que la marcha fracasó porque estuvo marcada por «mentiras y un doble discurso», concluyendo con una exigencia que calificó de inconsistente: la destitución de ministros a los que Morales llamó «narcotraficantes». Según García, las marchas deben tener como propósito la reivindicación de los derechos fundamentales de las organizaciones sociales, algo que, según él, no ocurrió en esta ocasión. «Lo único que buscaba era imponer su candidatura», señaló.
Tras siete días de recorrido desde Caracollo, Oruro, la marcha llegó a La Paz, donde se produjeron episodios de violencia y varios heridos. En su discurso final, Morales dio un plazo de 24 horas al presidente Luis Arce para que cambie su gabinete, antes de retirarse rápidamente al Trópico de Cochabamba, afirmando: “Aquí termina mi responsabilidad”.
El Pacto de Unidad criticó duramente esta actitud, con García señalando que «un líder revolucionario jamás abandona a su pueblo», recordando además el abandono de Morales durante la crisis de 2019. Fidel Surco, secretario de Relaciones Internacionales del MAS-IPSP, reafirmó que las organizaciones del Pacto de Unidad seguirán defendiendo el orden constitucional y la democracia en el país.