Mundo, 9 de septiembre de 2024 – Los incendios forestales en Bolivia, Brasil, Paraguay y Perú están generando una crisis ambiental que afecta a gran parte de Sudamérica. Este fenómeno ha provocado la destrucción de millones de hectáreas de bosques y pastizales, impactando gravemente la biodiversidad y la calidad del aire en múltiples países.
En Bolivia, más de 3,8 millones de hectáreas han sido consumidas por el fuego en lo que va del año, de las cuales 1,5 millones corresponden a áreas boscosas. La situación es crítica, con varios departamentos en emergencia y clases suspendidas debido al riesgo para la salud. En Brasil, los incendios han devastado más de 10.000 hectáreas en la región de Chapada dos Veadeiros, y el país enfrenta una ola de calor con temperaturas que superan los 40ºC. El humo de estos incendios está llegando a países vecinos como Argentina, afectando la visibilidad y la salud de la población.
El Servicio Meteorológico Nacional de Argentina ha emitido alertas por la llegada del humo a provincias del norte, lo que ha generado complicaciones en la calidad del aire y ha puesto en riesgo a las personas con problemas respiratorios. Este problema regional, impulsado por condiciones climáticas extremas y prácticas de quema no controlada, continúa agravándose y requiere de una respuesta coordinada entre los países afectados para mitigar sus consecuencias.